Dos cuartos de cuatro

Dos cuartos de cuatro, cuarenta y dos.
¡Ya voy! ¡Ya lo aclaro!...¡Ya estoy con mis tontadas!...Por algo le llamo yo a esto que escribo: "Estupiblog". Pero estoy segura que màs de uno habrá comprobado en sus propias carnes, que decir chorradas, desahoga mucho. Desahoga y relaja.
   Por cierto, un inciso, no tiene nada que ver, pero estoy muy contenta de que me hayan traducido al catalán, me encanta ver mis entradas escritas en catalá,( aquí podría meter de rondón el famoso trabalenguas de los siete jueces que comen hígado, que me enseñó una amiga cuando eramos pequeñas, y que yo repito muy orgullosa siempre que puedo, en catalán, claro, pero es que ... la última vez que lo hice quise que se me tragara la tierra...bueno, cosas mías...así que mejor lo dejo...) entre otras cosas por los muchos amigos que tengo allí, y por todas las cosas que desde que nací me unen a Cataluña. Se que a alguno le picará, pero es lo que tiene no felicitarme por mi cumpleaños...¡un pequeño pellizquito!
   Otra cosa, que casi se me olvida... Muchas gracias por visitar mi blog a esas estupendas y misteriosas personas que lo hacen desde Singapur, Turquía, Iran, India. Rusia, Haití, Sri Lanka, Alemania, Canadá Argentina, Colombia, Méjico, Estados Unidos, Perú, Siria, Francia, Reino Unido. Sinceramente nunca pensé que nadie tan lejano a mi pais, pudiera interesarse por este minúsculo blog. Gracias de corazón, aunque lo hayan visitado por error o por casualidad. ¡Me hace mucha ilusión!
  Ahora. Ya me centro.
2/4 de 4= 42
No es nada matemático. Es una "casualichorrada" o "chorrasualidad"
Dos de las cuatro amigas hemos cumplido cuarenta y dos años con seis días de diferencia una el veintiseis y la otra el dos.
2/4 de 4 42 el 26 y el 2
Y seguro que si seguimos jugando con los números encontramos todavía más coincidencias.
Para la próxima quedada que ya se aproxima, más que nada por la excusa de la celebración, tendremos otro tema de conversación más, para añadir a nuestra ya numerosa lista de temas.
Los otros dos cuartos, es que ya no me cuadran. ¡Que le vamos a hacer! ¡Es lo que tiene ser más joven! ¡Vienen empujando y empujando y nos descuadran las ecuaciones!
¡Vaya! resulta que no tengo nada más que decir y...¡son las dos!...¿Tendré que jugar a algún juego de azar?...