Nada se mueve si no lo empujo yo.

   Cuando menos te lo esperas sales.
   Y renaces solo.
   Los que te quieren te miran, te esperan, se mantienen cerca por si los necesitas, cuidando que no te pase nada, pendientes de ti.
   Pero salir, sales tu solo.
   Y todos somos capaces.
   Cuando estás mal, las palabras de los otros te parecen huecas y no las comprendes, ni alcanzas a entender su sentido. Pero cumplen su misión dejándo su poso en el subconsciente, y llevando a cabo un trabajo silencioso, que no percibes pero que, un dia de repente hace click.
   Y ese click lo has logrado tu, sin nadie más.
   Tus seres queridos siguen estando. Y cuando por fin levantas la cabeza, miras al frente y tus labios dibujan una sonrisa, que no es forzada, que no es porque si, ni para disimular, ni para agradar; sino que todo tu ser vuelve a sonreir y la alegría vuelve a salirte por toda tu piel, es entonces cuando te los encuentras a ellos, orgullosos de tu valentía y esfuerzo, devolviéndote la sonrisa y alegrándose por tu vuelta. Tu vuelta a la realidad. Tu vuelta a la vida . Tu vuelta a ti.
   Te miran sin preguntar porque ya saben todo. Mantienen sus brazos abiertos con amor infinito.
   Son los que están cerca los que descubren divertidos, que ahora te gusta el zumo de pomelo, y que te has apuntado a kárate. Son los que admiran tu evolución, tus ocurrencias, tus nuevos intereses, porque su mundo cambia con el tuyo, porque le enriquecimiento de tu renacer, repercute en todo tu alrededor. Porque tu aprendizaje sirve para todos.
   La vida es una búsqueda constante de soluciones, y todos y cada uno de nosostros  tenemos que subir los peldaños necesrios para encontrarlas, sin hacer pereza, sin asustarse.
   No hay que conformarse. No hay que sufrir por sufrir. No somos invencibles, pero si luchadores.
   No huyas de los malos momentos. Vívelos. Porque estos pasan. Forman parte de la vida. Como los buenos.
   Haz lo que te pida el cuerpo, que puede ser mucho o nada, y déjate llevar.
   Sin saber como, un día descubres que el mundo no ha cambiado. Has sido tu el que has cambiado.
   Has sido capaz de interpretar la partitura de tu vida.