"Te quiero, aunque no hagas lo que quiero". Yogesh Sharda

   Escribiendo como lo hago, en el minipuente del dia de la Madre, esta contestación de Yogesh Sharda, a una pregunta planteada por estudiantes de Periodismo, refleja una de las grandes hazañas de las madres: Querer incondicionalmente. La respuesta completa es la siguiente:
   -¿El amor es una de las causas de estrés?
Porque el amor emocional implica posesividad, control, exigencias, expectativas, celos, juegos de poder, dependencia, apego. Emociones que al principio no son visibles, sòlo hay un gran "te quiero", y tras él: "sólo si cumples mis deseos".
Continua así:
...El amor es indisociable de la paciencia, la aceptación, el darse ánimos, elevar al otro. Pero par tener ese tipo de amor uno necesita ser espiritualmente fuerte. Si tengo una buena relación conmigo mismo, puedo tener una buena relacion contigo.
   Es una entrevista publicada el sábado 30 de Abril en La Contra de La Vanguardia, por Ima Sanchís, y recomiendo leerla completa. Es una sección que alternan tres periodistas, la encontramos en la contraportada del diario, y que nos descubre personas con grandes cosas que aportarnos. Una pequeña biografía, la entrevista, y una foto que nos acerca aún más al entrevistado. Son personajes que deberían ser más conocidos de lo que son para la mayoría, y que abarca áreas y temas de lo más diverso, desde la política, la economía, la ciencia, la religión, la sociología, la psicología, la medicina, la cultura; todo tipo de orígenes y puntos de vista.
 Sigue así:
-¿Cómo saber tu nivel?
Preguntándome cuán feliz me siento. ¿Puedo manejar bien la alabanza y la crítica? Cuando fallo en algo: ¿cuán malhumorado me pongo?, ¿cuál es mi nivel de autocontrol? ¿cuánta felicidad puedo dar a los demás?
-¿Y cómo gestionar el estrés?
Hay un principio muy sencillo, pero que pocos practican, se trata de tener siempre presente que no puedes controlar las circunstancias ni a las personas. Lo único que puedes controlar es tu respuesta.
-Entiendo
Así que animo a las personas a que dejen de intentar controlar a los demás y empiecen a controlarse a sí mismas. Pero para tener autocontrol debes tener cierta fortaleza, que se alimenta con momentos de silencio.

   Esto es sólo una pequeña parte de los interesantes consejos que han recibido unos universitarios, que deberíamos ampliar y aplicarnos todos.